El tiramisú es un postre frío de origen italiano, concretamente de la región del Véneto, al noreste de Italia, que se degusta con cuchara. Su nombre deriva del italiano ‘tira mi su’, que traducido al castellano significa ‘levántame el ánimo’.
Y ello se debe a que se dice que se creó por las prostitutas de los años cincuenta de esta región italiana para dar energía, eliminar el cansancio y levantar el ánimo de sus clientes. Otra versión de su origen explica que el nombre significa más bien ‘tira de mi’ o ‘elévame’, debido a que probar este postre tan exquisito te permite elevarte al séptimo cielo.
Por lo tanto, se trata de un postre moderno, que no tiene tantos años como otros platos conocidos de la cocina italiana, pero que en cambio ha sabido hacerse popular mundialmente. Además, existe una gran cantidad de variantes, pero todas las recetas de este riquísimo postre comparten varios ingredientes que podríamos considerar principales: un ingrediente sólido (bizcocho, galletas, etc.) humedecidos en café, entre capa y capa una crema a base de queso mascarpone, huevos batidos y azúcar, y cacao en polvo. Estos ingredientes, muy particulares por la energía que aportan, por sus sabores y la cremosidad que se puede conseguir al usarlos, hacen que este postre sea una verdadera delicia para nuestro paladar.
En este caso, os presentamos la versión de la receta más italiana, original y fácil de hacer que existe, para que no exista ninguna excusa a la hora de preparar este postre.
Ficha
Tiramisú
Equipment
- Molde rectangular
- Batidor
- Bol
Ingredientes
- 500 gramos queso mascarpone
- 20 bizcochos de soletilla (savoiardi o novara)
- 350 ml café líquido
- 2 huevos
- 80 gramos azúcar
- 30 gramos cacao puro en polvo
Elaboración paso a paso
- Se prepara el café y lo dejamos enfriar en la nevera.
- Mientras tanto, en un bol separamos la clara de la yema de los huevos, y montamos las claras a punto de nieve. Se puede hacer a mano, o más fácilmente haciendo uso de una batidora de varillas eléctrica.
- En otro bol montamos las yemas junto con el azúcar hasta que el azúcar se disuelva completamente y la mezcla aumente de tamaño y adopte un tono más amarillo.
- A continuación, añadimos poco a poco el queso mascarpone hasta conseguir una masa sin grumos y suave.
- Añadimos las claras que teníamos reservadas y mezclamos de nuevo suavemente hasta conseguir una mezcla con todos los ingredientes perfectamente integrados. Es importante que se mantenga la textura cremosa que se ha conseguido al montar las claras al punto de nieve.
- En un molde rectangular, cubrimos la base con bizcochos de soletilla y los mojamos con el café frío. Repartimos un tercio de la mezcla de queso mascarpone y huevos por encima de los bizcochos hasta cubrirlos completamente.
- Repetimos el paso anterior otras dos veces, hasta tener montadas un total de tres capas de bizcochos, café y crema.
- Reservamos y mantenemos el resultado en la nevera un mínimo de 3 horas, hasta el momento de servirlo. Aunque lo más recomendado es que lo dejemos reposar unas 8 horas. De esta forma, permitimos que los sabores se asienten y la crema adquiera más consistencia.
- Finalmente, antes de servir, espolvoreamos el cacao en polvo, tamizando con un colador, hasta cubrir el tiramisú con una fina capa.
Notas
- DIFICULTAD: fácil
- PRESUPUESTO: medio-bajo
Recomendaciones
Es importante que es café se usa cuando esté bien frío, o de lo contrario los bizcochos de soletilla se podrías humedecer demasiado. Y, por su puesto, que el café sea de calidad es clave para conseguir un sabor mucho mas intenso y sabroso.
La mezcla de yemas y azúcar se tiene que integrar bien a base de batir energéticamente, hasta el momento en el que los granos de azúcar no se noten y la mezcla sea totalmente homogénea.
Una versión muy extendida de la receta de tiramisú incluye la mezcla de un chorro (al gusto) de licor de Amaretto con el café que se usará para mojar los bizcochos de soletilla, para darle al postre un toque mas adulto.