Postre

Tarta de Manzana, Queso y Almendras

Descubre una forma diferente pero deliciosa de probar el clásico pastel de manzana con esta Tarta de Manzana, Queso y Almendras. Combinando la dulzura natural de las jugosas manzanas, la cremosidad del queso y el crujido de las almendras, esta tarta ofrece una mezcla única de sabores.

Personalmente, adoro todas las versiones de la receta de pastel de manzana que he probado, pero esta es sin lugar a dudas una de mis favoritas. La tarta logra el equilibrio perfecto entre lo dulce y lo salado, lo que la convierte en un plato destacado para cualquier ocasión, las manzanas aportan un relleno tierno y caramelizado, mientras que el queso añade un toque sutil que realza la profundidad de sabor. Una masa crujiente y mantequillosa envuelve el relleno, y las almendras tostadas por encima brindan un delicioso crujido. Ya sea servida caliente con una bola de helado de vainilla o disfrutada sola, esta tarta de manzana, queso y almendras es una receta fácil de preparar y deliciosa para tener siempre a mano.


Receta

Tarta de Manzana, Queso y Almendras

Esta Tarta de Manzana, Queso y Almendras combina manzanas dulces, queso cremoso y almendras crujientes en una masa dorada y mantequillosa. El equilibrio perfecto de sabores la convierte en un postre delicioso y único para cualquier ocasión.
Tiempo de preparación 40 minutos
Tiempo de cocción 40 minutos
Tiempo total 1 hora 20 minutos
Plato Postre
Cocina Europea
Raciones 8 personas
Calorías 300 kcal

Equipment

  • 1 Bol
  • 1 Batidor
  • 1 Molde de tarta 22 cm

Ingredientes
  

  • 180 gramos harina de trigo
  • 150 gramos mantequilla
  • 50 gramos azúcar glas
  • 1 huevo
  • Sal

Relleno de queso crema

  • 200 gramos queso crema
  • 50 gramos azúcar

Relleno de manzanas

  • 3 manzanas
  • 50 gramos azúcar
  • 50 gramos almendras laminadas
  • 1 cucharada canela en polvo

Decoración

  • Azúcar glas

Elaboración paso a paso
 

Para la base:

  • Forra un molde de 22 cm con papel vegetal y engrasa los bordes con mantequilla.
  • En un bol, mezcla la harina, el azúcar y la sal. Añade la mantequilla poco a poco, usando las manos, y sigue mezclando hasta obtener una masa homogénea.
  • Presiona la mezcla en el molde, formando la base y creando un borde de 2 cm en los lados. Luego, refrigera mientras preparas el relleno.
  • Precalienta el horno a 230°C.

Para el relleno de queso crema y manzana:

  • Bate el queso crema, el azúcar y la vainilla hasta que quede suave. Reserva.
  • Pela y corta las manzanas en láminas finas.
  • Mézclalas con azúcar y canela en un bol grande.
  • Vierte la mezcla de queso crema sobre la base enfriada y coloca las manzanas por encima.
  • Espolvorea almendras laminadas sobre las manzanas.

Horneado y presentación:

  • Hornea a 230°C durante 10 minutos, vigilando las almendras.
  • Cuando las almendras estén tostadas, cubre con papel de aluminio y baja la temperatura a 200°C. Hornea durante otros 30 minutos.
  • Deja enfriar la tarta sobre una rejilla y desmóldala. Espolvorea con azúcar glas y sirve caliente o fría.

Recomendaciones

  • Usa manzanas tipo Golden o Granny Smith, ya que son las mejores opciones para este tipo de tartas. Las Golden son dulces y suaves, mientras que las Granny Smith añaden un toque ácido que contrasta bien con el queso.
  • Para un toque especial, sirve la tarta con una bola de helado de vainilla o un poco de nata montada. La combinación de la tarta templada con algo frío y cremoso es espectacular.
  • Asegúrate de no dejar las almendras demasiado tiempo en el horno, ya que se pueden quemar rápidamente.
  • Asegúrate de que las manzanas estén bien distribuidas por encima de la crema de queso, pero sin sobrecargar la tarta. Demasiadas manzanas pueden hacer que la tarta quede muy húmeda.
  • Si te gusta un toque extra de sabor, puedes agregar un poco de nuez moscada o jengibre en polvo al relleno de manzana. Esto complementará bien el queso y las almendras.
  • Para una base crujiente y quebradiza, es importante que la mantequilla esté bien fría al mezclarla con la harina. Esto ayudará a que la masa se desmorone correctamente. También puedes refrigerar la masa después de formarla para evitar que se deforme al hornearse.
Hi, I’m jperqu